Ser un incansable viajero y buscar el máximo contacto con la Naturaleza no necesariamente ha de suponer tener que ir de acampada ni mucho menos dormir a cielo abierto. No, al menos, desde que existen inventos geniales como éste, que llevan la misma habitación del hotel al corazón verde de cualquier paisaje.
La Cabin Drop XL es ideal para viajeros o nómadas que buscan disfrutar del paisaje como si se vivieran al aire libre, pero con todas las comodidades del hogar y, según explican sus diseñadores, In-tenga Design, permite “alojarse en una microarquitectura hotelera en plena Naturaleza”.
Se trata de un refugio prefabricado construido con materiales de bajo impacto ambiental, como el vidrio y la madera. Además, para no dañar el suelo dispone de unas patas ajustables de acero, pensado también para una mayor estabilidad en terrenos desiguales.
Con poco menos de 100 metros cuadratos, es una versión más grande que su Drop Eco Hotel, galardonado en 2012 en la convocatoria de diseño de módulo habitacional organizada por la empresa Urban Square.
Inspirado en la Naturaleza
Su diseño se inspira en formas orgánicas y el confort es un elemento que se cuida en su interior de forma exquisita. Quizá éste sea uno de sus defectos, ese exclusivismo que lo convierte en una construcción modular de lujo, no accesible más que personas con muuuucho dinero que puedan pagar tanto como los cambios de ubicación.
Como concepto, sin embargo, es fantástico. Ahora que hay una importante demanda de construcciones prefabricadas de tipo modular para convertirlos en un hogar, enfocada de otor modo, la idea podría jugar a favor de los bolsillos más modestos.
El interior de este pequeño hotel individual tiene grandes ventanales en paredes y techos, que permiten ver el el entorno y aprovechar la luz natural. El transporte es posible allí donde deseemos, desde el borde de un acantilado hasta en medio de una pradera o en la misma orilla del mar…
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